Probablemente habrás oído hablar del accidente masivo de Amtrak ocurrido a finales del mes pasado en DuPont, Washington. El accidente se produjo cuando el Amtrak Cascades 501 entró en un paso elevado en curva a 130 km/h, casi el triple del límite de velocidad de la curva, de 50 km/h. El tren descarriló al tomar la curva, lanzando varios vehículos de pasajeros por los aires y al tráfico de hora punta que pasaba por debajo. Más de 100 personas sufrieron heridas en el accidente y al menos tres murieron. A primera vista, la causa principal del accidente fue la velocidad del tren. Pero ¿podría haberse hecho algo para frenar el tren antes del accidente? ¿Podría el control positivo de trenes (PTC) haber detenido el Amtrak Cascades 501?
¿Qué es el Control Positivo de Trenes y cómo podría haber salvado la Amtrak Cascades 501?
El PTC es un sistema que utiliza GPS, radio inalámbrica y ordenadores para controlar los movimientos y la velocidad de un tren. Si un tren muestra señales de que se mueve demasiado deprisa o puede causar un accidente, el PTC puede ralentizar o detener automáticamente la locomotora. La Asociación Federal de Ferrocarriles ha dicho en el pasado que el PTC es el avance más importante en la seguridad ferroviaria en más de un siglo. Alrededor del 40% de los accidentes ferroviarios se deben a errores humanos. Si todos los raíles y trenes estuvieran equipados con PTC, los diseñadores creen que podrían eliminarse la mayoría o la totalidad de estos accidentes. Por estas razones, el gobierno federal ha ordenado que todos los trenes estén equipados con PTC para finales de 2018. Desde entonces, Amtrak ha equipado con PTC el 49% de sus trenes y el 67% de sus raíles. El raíl donde se produjo el descarrilamiento estaba equipado con PTC; sin embargo, no entrará en funcionamiento hasta el segundo trimestre de 2018. Si has resultado herido en un accidente ferroviario en la Costa Oeste, nuestro bufete puede ayudarte.
